Si tu empresa está obligada a cumplir con el Anexo 30 de la Resolución Miscelánea Fiscal (RMF), seguro ya has escuchado el término: “archivos JSON”. Y si no, es momento de poner atención, porque son una pieza clave en el cumplimiento fiscal exigido por el SAT.
Muchas empresas no los generan correctamente, otras lo hacen manualmente (con un alto riesgo de error), y otras simplemente desconocen su existencia… hasta que llega una auditoría.
En este artículo te explicamos de forma clara y práctica:
- Qué es un archivo JSON según el Anexo 30
- Qué información debe contener
- Cómo generarlo correctamente
- Y cómo automatizarlo para evitar errores y sanciones
¿Qué es un archivo JSON y por qué lo exige el SAT?
Un archivo JSON (JavaScript Object Notation) es un formato de intercambio de datos estructurado y ligero, que el SAT utiliza para recibir información digital sobre los controles volumétricos de hidrocarburos y petrolíferos.
Según el Anexo 30, las empresas obligadas deben enviar estos archivos de manera diaria y mensual, con información precisa sobre:
- Volumen de entrada y salida de combustibles
- Datos de medición y consumo
- Información técnica de tanques, ductos o sistemas de almacenamiento
- Relación con los CFDI de ingresos, egresos y traslado
- Firmas digitales y claves de registro
Los JSON deben generarse con base en la estructura definida por el SAT y ser enviados en tiempo y forma a través del Buzón Tributario o la plataforma correspondiente.
¿Qué empresas están obligadas a generarlos?
De acuerdo con la RMF, todas las empresas dentro de la cadena de suministros de hidrocarburos. Aquellas almacenan o autoconsumen para usos propios petrolíferos o gas natural también, están obligadas a contar con controles volumétricos y generar los archivos JSON si:
- No tienen permiso de la CRE y consumen más de 75,714 litros de petrolíferos al mes o más de 5,000 GJ de gas natural al año.
- Sí tienen permiso de la CRE, estén o no operando activamente ese mes.
¿Qué pasa si no los generas o lo haces mal?
El SAT puede aplicar sanciones como:
- Multas de hasta $5 millones de pesos
- Suspensión temporal de actividades
- Clausura de instalaciones
- Pérdida de cumplimiento ante proveedores y autoridades
Para cumplir con el Anexo 30, no basta con tener los datos. Deben estar:
✅ Registrados en tiempo real
✅ Relacionados correctamente con tus CFDI
✅ Estructurados según el esquema técnico que exige el SAT
✅ Firmados digitalmente con tus llaves fiscales
✅ Entregados en los tiempos establecidos
Conclusión
El archivo JSON del Anexo 30 no es un documento más: es un requisito obligatorio que puede marcar la diferencia entre operar sin problemas o enfrentar sanciones millonarias.
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